¿Necesitas preparar pruebas clásicas para hacer una gincana en casa una gincana en casa, pero no tienes mucho material, originalidad o espacio para ello? ¿Quieres pasar un buen rato con tu familia o tu grupo de amigos pero no se te ocurre cómo?
¡No te preocupes!
Aquí tienes algunas ideas básicas para realizar cinco pruebas clásicas en casa que, aunque son sencillas y típicas, no pierden su atractivo y su vigencia, precisamente porque son clásicas. A continuación, 5 pruebas clásicas para preparar gincanas en casa:
El huevo y la cuchara
Velocidad y equilibrio es lo que hará falta para ganar en el juego del huevo y la cuchara. ¡Es realmente sencillo y divertido!
Los participantes se colocarán uno al lado del otro frente a una línea, que será desde donde saldrán para realizar una carrera. Sin embargo, ¡no es una carrera normal! Para participar en ella, cada jugador sujetará una cuchara con su boca. Además, el cubierto contendrá un huevo. El objetivo será llegar el primero o la primera a la meta sin que se caiga el huevo de la cuchara. Evidentemente, ¡no vale tocar el huevo con las manos en nungún momento! Si se te cae, quedas eliminad@ 🙂
Existe una alternativa que no incluye carrera, y es por ello menos competitiva. Para ello se diseña un pequeño circuito en una habitación o espacio, colocando obstáculos que se consideren apropiados. En este caso, se cronometra el tiempo que tarda cada participante en recorrer el circuito separadamente (es decir, uno detrás de otro). Ganará el que lo haya hecho en menos tiempo. Y claro, igual que antes, si se te cae el huevo, estás eliminado.
¡Importante! por muy divertida que suene la prueba, hay que tener cierta precaución. Si se quiere evitar que la posible caída del huevo manche tu alfombra, tu sofá, tu mesa o el suelo, habrá que adecuar el circuito lo máximo posible y que los obstáculos sean fáciles de limpiar y no haya riesgo de mancha permanente. No obstante, si se prefiere no correr ese tipo de riesgos, la prueba se puede realizar con una pelota de ping-pong, aunque tal vez la gracia esté en el riesgo.
Contar un minuto
Si se busca una lista de 5 pruebas clásicas para preparar gincanas en casa, esta prueba no puede faltar.
Para ganar en la prueba de contar un minuto, no es necesaria ninguna cualidad física ni psicomotriz, sino que se requieren habilidades mentales. La prueba consiste en lo siguiente. Se colocan los miembros en fila (o en círculo). Si la prueba se está realizando por equipos, suele participar únicamente un miembro de cada equipo. Los participantes cierran totalmente los ojos. Cuando el árbitro o el juez diga «ya», los jugadores empezarán a contar en su cabeza un minuto (60 segundos), mientras el juez o el árbitro lo está cronometrando a tiempo real con un reloj o cronómetro.
Cuando los participantes vayan acabando su «minuto mental», deberán levantar la mano. En ese momento el árbitro en ese momento consultará su cronómetro para ver si el minuto real se corresponde con el minuto mental que ha contado el jugador. Para esto suelen ser útil los cronómetros en los que se pueden hacer «marcas» sin detener el tiempo.
Así se hará hasta que haya acabado cada participante. Ganará el que haya sido capaz de acercarse más al minuto real, sin pasarse del minuto.
Ejemplo: si alguien ha levantado la mano cuando habían pasado 57 segundos y un contrincante lo ha hecho cuando llevaba 1 minuto y 1 segundo, a pesar de que realmente se ha acercado más el segundo, ganará el primero porque no se ha pasado.
¡Importante! El público o los demás miembros de los equipos deberán permanecer totalmente callados y en silencio, pues podrían desconcentrar a los participantes. Del mismo modo, el silencio evitará cualquier trampa, pues el participante podría haberse puesto de acuerdo con algún miembro de su equipo para que este, desde fuera, cronometre el minuto y cuando se llegue a él haga cualquier tipo de ruido (toser, estornudar, etc.) y que esa sea la señal de que el participante tiene que levantar la mano. Por ello también es importante no explicar la prueba hasta que los participantes están seleccionad@s.
La pelota de ping-pong
Para realizar esta sencilla prueba no necesitarás más que una pelota de ping-pong y un vaso, de plástico o de cristal. El vaso se colocará en un punto del suelo, a cierta distancia de los participantes. El participante tendrá que introducir, desde donde está, la pelota dentro del vaso. Hay dos formatos para hacerlo, según se prefiera:
1. La primera es lanzando la pelota con la mano. Según qué reglas elijas, se puede decidir si la pelota puede votar una vez, dos, tres, o no votar ninguna vez.
2. La otra manera, y tal vez la más divertida, es soplando la pelota sin que toque el suelo y, de ese modo, llevándola hasta donde está el vaso. Parece difícil, pero no lo es tanto. Se inclina la cabeza como si se mirase al techo, y se coloca la pelota encima de los labios. Con un pequeño soplo, la bola se eleva fácilmente.
¡Importante! si se opta por la segunda opción, tal vez lo ideal es que el recipiente en el cual introduces la pelota está algo elevado, encima de una mesa, un mueble o una silla. En cualquier caso, que esté a la altura de los participantes, para que cuando llegues a él no tengas que agacharte, algo que elevaría la dificultad. Si es muy difícil introducir la pelota en un vaso mediante el soplo, se puede disminuir la dificultad y hacer que el participante simplemente tenga que llegar a un punto, o hacer que tenga que recorrer un circuito con obstáculos (o sin ellos, como se prefiera).
Sentadillas
El único material que necesitarás para esta prueba, es una pared. ¿Hay algo más de casa que eso? También se necesitará a alguien con las piernas fuertes y la determinación suficiente como para vencer el cansancio. Cada participante de la prueba se colocará de espaldas a una pared, tocándola con la parte trasera del cuerpo. Cuando el árbitro diga, bajarán su cuerpo flexionando las piernas como si estuvieran en posición de estar sentados en una silla. Es decir, formando un ángulo de 90 grados. En todo momento, su espalda tendrá que estar en contacto con la pared. El que aguante más tiempo en esa misma posición, gana.
¡Importante! el cansancio y la pesadez en las pantorrillas harán mella en los participantes- Por eso, tenderán a separar un poco el cuerpo de la pared o a bajar demasiado el culo. Por eso es importante que el árbitro vigile constantemente que no pierdan la posición, pudiendo eliminar al que considere que no está bien puesto.
Ping-pong gol, prueba de gincana en casa
Nuevamente, se necesitarán pelotas de ping-pong para llevar a cabo esta prueba clásica para una gincana en casa. El juego tendrá lugar sobre una mesa cuadrada, preferentemente, para que puedan jugar cuatro. Cada participante se colocará en uno de los cuatro lados. Se pondrá una pelota de ping-pong en medio de la mesa. Cuando se diga «ya», soplando tendrán que intentar meter la pelota en los lados de la mesa donde se encuentren sus adversarios. Como si fuera un gol. Se puede puntuar de diferentes maneras. Una es contando quien mete más goles. El que meta más, gana. Otra es contando a quien le meten más goles. Al que le metan más, pierde.
Si no se tiene una mesa cuadrada o se prefiere que jueguen solo dos, se puede usar una mesa rectangular y que las «porterías» sean los lados cortos de la mesa. En cualquier caso, no deja de ser una de las 5 pruebas clásicas para gincanas en casa.
¡Importante! los participantes no podrán usar en ningún momento las manos para mover la pelota, solo el aire de sus soplos. Por eso, lo mejor será que las coloquen detrás para evitar la tentación de usarlas.
¡Y esto es todo! Esperamos que te hayan gustado estas 5 pruebas clásicas para gincanas en casa. No olvides visitar nuestra página web para más contenidos 🙂
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